El tratamiento de migraña con toxina botulínica (comúnmente llamado Botox) ha sido objeto de una serie de estudios clínicos realizados en todo el mundo. Su uso se ha convertido en un procedimiento establecido en EE.UU. desde algunos años y también en el Reino Unido está aumentando su popularidad. La toxina botulínica del tipo A es una proteina natural que bloquea la liberación de acetilcolina. Los impulsos nerviosos no pueden ser transmitidos al músculo, inhabilitándolo para contraerse y paralizándolo efectivamente.
El efecto de toxina botulínica del tipo A durante aproximadamente dos a cuatro meses, después se libera nuevamente la acetilcolina y el músculo en cuestión se reactiva.
Hay un número de puntos en los cuales pasan los músculos en la cabeza. Cuando los músculos se contraen, el nervio es comprimido. Los síntomas de migraña en muchos pacientes se deben a la contracción muscular en las siguientes áreas:
Una inyección de toxina botulínica del tipo A (Botox) relaja los músculos relevantes. El médico determina los lugares específicos de inyección en función de los puntos desencadenantes del paciente. El paciente documenta luego los cambios de síntomas en un diario de migraña
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